Saturday, November 18, 2006

Raíces...

Luego de esa brusca batalla contra el amanecer, nos íbamos al comedor a tomar desayuno. Con el tiempo he descubierto que allí se manifestaba, solapadamente, la diferencia de clase entre las internas porque al café con leche y pan debíamos agregarle nuestro aderezo o, mejor dicho, aquél que representaba el poder adquisitivo de cada familia.
Yo era una de las mejores dotadas para ése y otros menesteres, ya que mi condición de hija única me hacía gozar totalmente del escuálido sueldo de mi madre.
Provenía de una familia de trabajadores y estudiantes, integrada por mi abuela (todo un personaje de antología por el poder absoluto del lado más oscuro y pernicioso de sus genes); mi madre, una mujer joven que se había visto enfrentada al mundo del trabajo luego de infructuosos y rebeldes intentos por estudiar y por un embarazo repentino que le había trastocado la vida a los 20 años; y mis dos adolescentes tíos: José, que intentaba ser el hombre de la casa en medio de un matriarcado implacable y Pamela, mi tía distinta, rebelde, que parecía más un accidente en la casa que una integrante sanguínea de la familia... y yo, una persona con apellidos prestados y a punto de cristalizar un desarraigo venoso e imperecedero: crecer en dos mundos: tener una vida de lunes a viernes y otra los fines de semana.

9 Comments:

Blogger Gonzalo Villar Bordones said...

Me intrigó tu tía.

7:14 PM  
Blogger Warren/Literófilo said...

Tías mas intrigosa a mi también, te invitó a mi blog, nos has vuelto a pasar.

6:07 PM  
Blogger Gonzalo Villar Bordones said...

y qué ocurrió después en el internado?

4:00 AM  
Blogger Alejandro Hirmas said...

¿en el internado no habían personajes intrigantes y escalofriantes cómo en la casa?

10:30 AM  
Blogger Dulce Magnolia said...

cuando la cotidianeidad es diferente
para vos..
par mi...

2:26 PM  
Blogger Unknown said...

Si, interesante la tia rebelde, pero tambien el vivir en dos mundos... el que acabo de leer ¿a cual de los dos pertenece?
Cariños.

6:25 AM  
Blogger Isabel Barceló Chico said...

Me quedo con la intriga de saber c�mo se consigue conciliar esas dos vidas. Saludos cordiales.

9:49 AM  
Blogger el sin libro said...

aahhhh, tanto tiempo sin recuperar el tiempo en el mundo de los blogs (ya sabes, trabajo, dramas, no tan dramas y comedias. Hasta el bendito facebook), y ahora que me vuelvo a encontrar con tus letras después de tanto. Y sigo pensando "cresta, qué bien que escribe!"

Un saludo

Hugo

(ex tierragramas)

7:28 PM  
Blogger La Hormiga said...

Me encantó. Al leerlo, me recordó a mi propia vida y a Macondo, a ese lugar al que todos, de una u otra manera, pertenecemos.

Un abrazo.

2:51 AM  

Post a Comment

<< Home